Rumberas: Magia Negra en el Cine

¿Alguna vez imaginaste que las rumberas del cine mexicano de los años 40s y 50s del siglo XX eran las principales practicantes de Magia Negra en las Américas?

Investigadores encontraron que "la práctica de la santería y el Palo llegaron con las rumberas y sus músicos afrocubanos del mundo del cine y los espectáculos nocturnos."

Una actriz y bailarina de nombre Arlette Ramos se considera la santera más antigua de México e iniciada bajo determinado
orisha en 1954 y posteriormente se inició en Palo.

En un primer momento, para poder iniciarse en la Magia Negra se requería viajar a Cuba; pero en los años posteriores, Miami, Los Ángeles y Nueva York, se convirtieron en puntos neurálgicos de la Alta Magia Afrocaribeña. De acuerdo con investigadores del tema, fue en los años setenta del siglo pasado cuando aparecieron los primeros iniciados en México, aunque todavía en 1989 no había más allá de una decena de familias practicantes de la Magia Afrocaribeña, sin ser éstas, étni

El Palo Mayombe es un sistema mágico-religioso afrocubano surgido en el siglo XVI durante el apogeo de la colonización española y el tráfico de esclavos de origen congo bantú que fueron llevados a la isla caribeña

En la
siguiente década, en 1989, en el caso de los “narcosatánicos”, conocido así
por en periodísticas, programas de televisión, blogs, documentales y películas
nacionales e internacionales, fue implicada la religión que nos ocupa con la
actividad delictiva. Se supo de Jesús Constanzo “El Padrino”, nacido en Miami
y descendiente de una familia cubana, practicante del Palo Mayombe. Ligado
con un grupo de personas que él había iniciado en la religión realizó actividades
relacionadas con el narcotráfico. Se aseguró que, con “la intención de fortalecer
a su nganga” y recibir los favores del nfumbi15, ofrecía vidas humanas, entre
ellas la de Mark Kilroy, un estadounidense, estudiante de medicina que había
desaparecido en Matamoros Tamaulipas, lugar de residencia de Constanzo.
En el rancho Santa Elena ocupado por “El Padrino” se encontraron 12 rituales paleros. Sin embargo, durante nuestro trabajo de investigación no
identificamos elementos que hicieran referencia a sacrificios humanos, ya que
siempre estuvieron relacionados con el mundo animal. Podemos afirmar pues,
que el caso Constanzo fue un caso muy particular. Incluso podríamos decir
que se trató de una interpretación poco acertada de este sistema religioso, que
transgredió los cánones establecidos y ayudó a la estigmatización social que
hoy en día cargan los practicantes paleros.
cadáveres “descuartizados” de personas que habían sido ofrecidas en diversos
rituales paleros16. Sin embargo, durante nuestro trabajo de investigación no
identificamos elementos que hicieran referencia a sacrificios humanos, ya que
siempre estuvieron relacionados con el mundo animal. Podemos afirmar pues,
que el caso Constanzo fue un caso muy particular. Incluso podríamos decir
que se trató de una interpretación poco acertada de este sistema religioso, que
transgredió los cánones establecidos y ayudó a la estigmatización social que
hoy en día cargan los practicantes paleros.
La estigmatización alentada por los medios de comunicación, que
dieron a conocer la existencia de una “secta” más que se practicaba en el país,
contribuyó a identificar a los paleros como “satánicos”, “santeros”, practicantes
de “vudú”, etc. La “investigación periodística” reportó que analizó un caldero
encontrado en el rancho concluyendo que se trataba de una práctica afrocubana,
el Palo Mayombe17. A pesar del estigma, a partir de los años 90 la visibilidad
y divulgación de las religiones de origen afrocubano se vieron favorecidas por
nuevos medios de comunicación: